Mazatlán, Sin. -Los pescadores de altamar enfrentarán una Navidad sombría debido a los desafíos que atraviesa el sector en Mazatlán. Jesús Omar Lizárraga Manjarrez, presidente de la Unión de Armadores, afirmó que la situación es desalentadora para todos, ya que la producción de los barcos no logra cubrir los costos de operación necesarios para mantener las capturas y continuar generando empleo.
"La situación aquí es muy triste. Muchas embarcaciones ya están amarradas, de las pocas que salieron a operar esta temporada, ya que la producción capturada durante el viaje no alcanza a cubrir los costos de operación", comentó.
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Además de los costos de operación, la situación de los pescadores empeora con la disminución de pedidos, la interrupción en la compra de productos por parte de Estados Unidos y la importación de camarón centroamericano, lo que ha dejado sin oportunidades al comercio interno.
Lizárraga Manjarrez señaló que el 50 por ciento de los 241 barcos que salieron a pescar este año ya se encuentran amarrados de manera anticipada en el muelle pesquero, ya que normalmente la temporada termina hasta marzo.
Son pocos los que harán el último viaje
En un recorrido realizado por el muelle pesquero, el marinero Jesús Estrada aseguró que él está a punto de salir nuevamente de viaje y que no pasará las festividades de Navidad y Año Nuevo en tierra.
"Esperamos salir este miércoles, estamos esperando que nos den luz verde. Tenemos que aprovechar porque este trabajo es temporal, además de que debemos aprovechar que tenemos la oportunidad de realizar el último viaje. Casi toda la flota está amarrada, somos muy pocos los que nos aventuraremos en ese último viaje a altamar en la esperanza de traer un poco más de producción", concluyó.
La flota camaronera de Mazatlán está compuesta por alrededor de 400 barcos camaroneros que emplean a poco más de 3 mil pescadores.
