Mazatlán. - Al terminar la temporada de pesca para miles de pescadores, buscan emplearse en actividades como la albañilería y la seguridad privada; reveló el presidente de la Unión de Armadores, Jesús Omar Lizárraga Manjarrez.
Y es que confirmó, el 40% de la flota camaronera de Mazatlán, compuesta por 500 embarcaciones, ya no ha podido salir a las capturas por los bajos volúmenes y precios del producto, así como los altos costos de operación.
Detalló que de los cuatro mil pescadores que salen cada temporada a las capturas de camarón de altamar, alrededor de dos mil 400 ya han quedado desempleados, y se están empleando en diversas actividades.
Muchos de nuestros pescadores ya están emigrando a otras actividades, algunas sin estar en las condiciones físicas para poder realizar estas actividades, entonces pues ahorita es un panorama muy complejo, pero necesitan emplearse para llevar el sustento económico a sus hogares.
Lizárraga Manjarrez
Lizárraga Manjarrez comentó que decenas de pescadores buscan sobrevivir, luego de que la pesca ha dejado de ser lo que era antes, donde los volúmenes, tallas y precios del camarón de seis meses, permitían mantener a las familias hasta por un año entero.
Lamentó la difícil situación que vive el sector de la pesca, ante la falta de recursos para rubros tan importantes como la inspección y vigilancia de los sitios de desarrollo del crustáceo, ya que esto permitió el saqueo de la especie en etapa de reproductiva.
Indicó que son miles de familias las que dependen de la actividad en todo el país, las que están sufriendo por la falta de producción, y advirtió que para enero se incrementará el desempleo, ya que los trabajos en las plantas congeladoras también se mantienen en disminución, por los bajos porcentajes de camarón capturado.
POCO TRABAJO
El dirigente pesquero comentó que la maquila de camarón ha disminuido y el trabajo es poco, sin embargo, se espera se reactiven para Navidad y fin de año, una vez que entren a puerto los barcos que se encuentran de viaje.
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