Mazatlán, Sin.- La conexión que María Fernanda Tarango Arellano tiene con el futbol es tan fuerte que no le afectó cambiar de posición en su camino al profesionalismo.
La joven originaria de Toluca, Estado de México, desde los 4 años supo que su destino sería estar en una cancha de futbol, el recorrer ese pasto verde, el olor de cada pisada y el compañerismo dentro de los planteles en los que ha hecho equipo la hicieron enamorarse del deporte que su padre practicó a nivel profesional, para los equipos de Toluca y Pumas.
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“Mi mamá en un principio no estaba convencida de que jugara futbol, ella quería que fuera bailarina, es algo que no me desagradaba, pero el futbol me atrapó y opté por darle por ese camino y una pasión para mí”, recuerda la joven arquera.
Ella es de las jugadoras que comenzó con el proyecto de la Liga MX Femenil, en el 2017, pero su vida formativa inició a los 4 años de edad. Por su altura y su habilidad con el balón siempre destacaba y más porque era jugadora de cancha, no portera como lo es hoy en día.
“Como delantera era buena, tenía mucha idea, pero una vez que vi entrenar a los porteros y ver cómo se ensuciaban y rodaban, me llamó la atención y dije, yo quiero ser esa jugadora que viste diferente y hace cosas diferente, se lo externé al club Lyones, que fue mi primera escuela de futbol femenil a los 12 años, pero me dijeron que no porque ya estaban sus porteras y que me quedara como estaba, pero en verdad yo quería ser portera”, comenta.
Ese cambio repentino de posición le cambió el destino y aunque su padre tampoco quería que desarrollara en el futbol, siguió adelante con sus sueños.
Camino al profesionalismo
María Fernanda se salió del equipo en donde estaba para, de la mano de su papá, poder prepararse. Estuvo durante un año entrenando duro y desarrollando los reflejos para poder ya jugar como arquera, siendo el Club Deportivo Toluca el que le abriría las puertas.
“Durante el año que estuve preparándome se abrieron las fuerzas básicas del Toluca y era buena para lo que había, por mi altura, pero me entró la espinita de volver a ser delantera, pero mi papá me dijo que el puesto del portero no era muy demandado, y eso me ayudó a quedarme”, comparte.
Cuando tenía 16 años inició la creación de la Liga MX Femenil, que comenzó con un torneo de prueba donde necesitaban jugadoras juveniles y María Fernanda cumplió con los requisitos.
“Siempre me enfoqué en llegar a Primera División, siempre fui titular en fuerzas básicas y el profesor Juan Carlos Mendoza (ex técnico de Mazatlán) me llevó a la copa que se disputó ahí en Toluca y para mí fue algo nuevo, porque fue como empezar a empaparme de lo que era Primera División y además que el Toluca significa mucho, porque es el equipo al que le va mi abuelo y donde jugó mi papá”, recuerda.
Pero así como el profesor Mendoza la mantuvo con la ilusión de estar en primera división, así mismo se la cortó, a no ser registrada con el primer equipo, hasta que Rodolfo Vega, ex entrenador del Veracruz la vio en Toluca y la invitó al desaparecido Tiburones Rojos del Veracruz.
Su camino
Fue un 23 de julio del 2018 cuando Tarango debutó ya de manera oficial con Veracruz, ante Tijuana, equipo que pese a las limitaciones y los bajos apoyos que tenía lo lleva en el corazón, por todo lo que vivió.
“Veracruz era un club que no tenía nada, no es como ahora que los clubes tienen apoyo económico, convencí a mis papás de irme y me fui; en el equipo fueron muy sinceros y me dijeron que iba a ser la tercera portera, pero la primera portera se lesiona y yo salgo a la banca, el primer juego, Puebla nos mete 4 goles y yo salgo al siguiente partido como titular, fue una oportunidad rápida y empatamos 1-1 en el Pirata Fuentes”.
Sus buenas participaciones hicieron que Cruz Azul volteara a verla y la invitara a formar parte de sus filas.
“En Cruz Azul era todo muy exigente, me tocó un entrenador muy duro, tanto que el autoestima que tenía en Veracruz, él mismo me lo bajó, pero era muy diferente, en Cruz Azul te daban todo, aunque Rogelio Martínez fue duro conmigo, pero me forjó carácter y estoy agradecida por lo que forjó en mí. Además de que cuando tuve oportunidad con el Azul fue ante el Tiburón, mi ex equipo”.
Llega a Mazatlán
Después de mucho tiempo, María Fernanda regresó a las instalaciones de donde salió, el Toluca, apoyada por el ex arquero y suplente de Hernán Cristante en su momento, César “Chicharro” Lozano. Pero bien dicen que nadie es profeta en su tierra, y no la pasó del todo bien ahí, debido a que Alondra Ubaldo se afianzó de la portería, dejándola relegada a la banca.
“Toluca me marca para darme las gracias, no entré en planes con el equipo y se me vino el mundo encima, por ahí pensé en dejar de jugar, pero tuve la insistencia de Juárez y una amiga me dijo que fuera a Morelia, pero ella me dijo que se venía a Mazatlán y la pandemia cambió todo en el 2020, fue como volver a nacer en el futbol”.
Cuando la franquicia se iba creando, Fernanda estuvo a nada de irse a Juárez, pero quien era la directora deportiva, Jessica Castañeda, le hizo el llamado para venirse en una ciudad que no conocía como Mazatlán y que apenas iba a formarse dentro de la Liga MX, además de reencontrarse con Magali Cortés, con quien estuvo en Veracruz.
“Cuando llegamos eran 10 jugadoras de Morelia las que se vinieron a Mazatlán y por mi mente pasó que no íbamos a competir, nos concentraron en un lugar de beisbol (Academia del Pacífico), y ahí dormíamos todos, fue un rollo, pero eso nos unió como equipo, además de que nadie confiaba en nosotros, pero el apoyo de la gente fue muy bueno y fue algo que nunca había vivido en un club, la gente nos despedida en la Unidad Juárez, no ganábamos, pero la gente nos aplaudía el esfuerzo”, comenta.
Una revancha
La jugadora ha estado seis torneos con las moradas, siendo banca de Mariana Zárraga, hasta que llegó su momento de ser titular con el equipo en el Apertura 2021, pero luego llegó una terrible lesión que la dejó fuera de las canchas, en un partido ante Tigres, en el segundo tiempo en una jugada chocó contra Stephany Mayor y se rompió la rodilla.
“He tenido muchas revanchas en el futbol, porque la primera vez que jugué en Mazatlán, jugamos en Coapa, y me metieron ocho goles, me castigaron, dejé de jugar, mucha gente no me arropó y eso que solo me dieron un partido”, dice.
“Y ese torneo yo tenía miedo de los ochos goles y una hora antes me dijeron que iba a jugar, estaba muy nerviosa, pero dije: a ver, son personas igual que yo, tal vez tengan mucho talento pero lo vas hacer bien, fue una experiencia inolvidable por la seguridad que tuve, no solo por la lesión”.
Tras un año fuera María Fernanda sufrió con la lesión, pero regresó a la actividad en el Apertura 2022, donde fue titular en dos partidos, para volver a ser relegada, hasta que este Clausura 2023 parece que llegó su momento, ya que en su primer juego como titular ante Xolas, le dio el triunfo a las Cañoneras, además de ser la portera de la semana en la Liga MX, lo que le ha permitido resurgir como ave fénix.
La fecha
Fue el 23 de julio del 2018 cuando María Fernanda Tarango debutó de manera oficial con Veracruz.