/ lunes 22 de junio de 2020

De la necesidad, al regateo político



Recientemente se ha ubicado entre medios de comunicación estatales y locales, un tema que por su propia naturaleza es de especial relevancia para los sinaloenses, ya que se centra en una de las actividades que por nuestra vocación agrícola, nos resulta indispensable para el desarrollo del Estado y nuestras familias, y con ello me refiero a los precios de garantía a diversos granos producidos en Sinaloa.

Me parece que es justa y muy entendible la preocupación que ha significado para las y los agricultores de nuestro Estado la noticia que se circuló, respecto a la modificación de los precios de garantía por parte del Gobierno Federal para con el producto sinaloense, al “pretenderse la reducción” según declaraciones de diversas autoridades estatales, los montos de pago a semillas como son el maíz, el sorgo y el trigo panificable producido en Sinaloa.

Sobre este tema es importante recordar lo que ésta materia significa para el Gobierno Federal, pues existen compromisos legales que el mismo Presidente ha asumido y señalado en favor de las y los agricultores, acciones que han comenzado con el rescate del campo y el fortalecimiento de nuestro sector agroalimentario productivo, para concretar la seguridad alimentaria de todas y todos los mexicanos.

Es importante no olvidar que este gobierno, desde su puesta en marcha, ha impulsado diversos programas como son: Producción para el Bienestar, Precios de Garantía para la producción de alimentos básicos; Crédito Ganadero a la Palabra y Programa de Fertilizantes, entre los cuales sobresale un elemento beneficiador que se traduce en la entrega directa de los apoyos económicos federales a quienes más lo necesitan, y lo que es mejor, sin intermediarios.

He de resaltar que esta situación derivada de la divulgación a la noticia en comento, no solo se debe a estrategias políticas de algunos que buscan medrar de la necesidad de las mayorías, sino también del hecho de permanecer en la vista pública para seguir hurgando políticamente, aun cuando se saben moral y políticamente derrotados.

A la ciudadanía en general, y particularmente a los campesinos de Sinaloa, les hago un llamado a mantener la calma y confiar en los compromisos del nuevo gobierno, que a pesar de las condiciones del mercado y de las consecuencias económicas suscitadas por la pandemia del COVID 19, se ha asumido con cabalidad el pago de los precios en garantía convenido desde principio de año, y responsabilizándose como propios los ajustes ante cualquier eventualidad; el Gobierno Federal responderá por y para los campesinos.

Es momento de mantenernos ajenos a los juegos de aquellos que gustan de hacer negocios con los apoyos y dineros que son recabados para los más necesitados, pues se saben que su momento de declive ha llegado con la Cuarta Transformación.

DATO

Es importante no olvidar que este gobierno, desde su puesta en marcha, ha impulsado diversos programas como son: Producción para el Bienestar, Precios de Garantía para la producción de alimentos básicos; Crédito Ganadero a la Palabra y Programa de Fertilizantes.



Recientemente se ha ubicado entre medios de comunicación estatales y locales, un tema que por su propia naturaleza es de especial relevancia para los sinaloenses, ya que se centra en una de las actividades que por nuestra vocación agrícola, nos resulta indispensable para el desarrollo del Estado y nuestras familias, y con ello me refiero a los precios de garantía a diversos granos producidos en Sinaloa.

Me parece que es justa y muy entendible la preocupación que ha significado para las y los agricultores de nuestro Estado la noticia que se circuló, respecto a la modificación de los precios de garantía por parte del Gobierno Federal para con el producto sinaloense, al “pretenderse la reducción” según declaraciones de diversas autoridades estatales, los montos de pago a semillas como son el maíz, el sorgo y el trigo panificable producido en Sinaloa.

Sobre este tema es importante recordar lo que ésta materia significa para el Gobierno Federal, pues existen compromisos legales que el mismo Presidente ha asumido y señalado en favor de las y los agricultores, acciones que han comenzado con el rescate del campo y el fortalecimiento de nuestro sector agroalimentario productivo, para concretar la seguridad alimentaria de todas y todos los mexicanos.

Es importante no olvidar que este gobierno, desde su puesta en marcha, ha impulsado diversos programas como son: Producción para el Bienestar, Precios de Garantía para la producción de alimentos básicos; Crédito Ganadero a la Palabra y Programa de Fertilizantes, entre los cuales sobresale un elemento beneficiador que se traduce en la entrega directa de los apoyos económicos federales a quienes más lo necesitan, y lo que es mejor, sin intermediarios.

He de resaltar que esta situación derivada de la divulgación a la noticia en comento, no solo se debe a estrategias políticas de algunos que buscan medrar de la necesidad de las mayorías, sino también del hecho de permanecer en la vista pública para seguir hurgando políticamente, aun cuando se saben moral y políticamente derrotados.

A la ciudadanía en general, y particularmente a los campesinos de Sinaloa, les hago un llamado a mantener la calma y confiar en los compromisos del nuevo gobierno, que a pesar de las condiciones del mercado y de las consecuencias económicas suscitadas por la pandemia del COVID 19, se ha asumido con cabalidad el pago de los precios en garantía convenido desde principio de año, y responsabilizándose como propios los ajustes ante cualquier eventualidad; el Gobierno Federal responderá por y para los campesinos.

Es momento de mantenernos ajenos a los juegos de aquellos que gustan de hacer negocios con los apoyos y dineros que son recabados para los más necesitados, pues se saben que su momento de declive ha llegado con la Cuarta Transformación.

DATO

Es importante no olvidar que este gobierno, desde su puesta en marcha, ha impulsado diversos programas como son: Producción para el Bienestar, Precios de Garantía para la producción de alimentos básicos; Crédito Ganadero a la Palabra y Programa de Fertilizantes.