Mazatlán, Sin.- La fecha de inauguración de la avenida Gabriel Leyva se ha cambiado por lo menos en tres ocasiones, lo que ha causado molestia entre comerciantes, vecinos y automovilistas que transitan por la zona.
La primera fecha de inauguración que se propuso fue el 30 de septiembre, pero por las lluvias se cambió para el 7 de octubre, aunque si bien es cierto que las condiciones climatológicas han influido, las lluvias son de apenas hace tres meses, cuando la obra lleva en construcción 10 meses y contando.
Luego para el 7 de octubre tampoco fue posible y se dijo que el día 16 era una fecha tentativa, pero recientemente el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres anunció que la entrega en inauguración de la avenida podría ser hasta el viernes 22 de octubre.
Se había manejado también que las fechas se cambiaban para que estuvieran coordinadas con la agenda del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, quien visitaría Sinaloa y se buscaba que fuera participe del evento, sin embargo, la presencia del mandatario federal no es segura, incluso hay funcionarios que dicen que él no acostumbra a inaugurar obras de este tipo.
En el último informe emitido de los trabajos de remodelación, Jumapam reportó un 82% de avance, y que para este próximo jueves 14 se realizarán 12 interconexiones.
Al realizar un recorrido por la avenida, se observó que aún hay tramos donde no se ha removido siquiera el pavimento viejo, pero por otra parte, se empezó ya a trabajar en el embellecimiento del camellón, a la altura del Parque Bonfil.
En los últimos días de agosto que se restringió el paso vehicular en el tramo que está justo en frente de la estación de Bomberos y a la fecha no se ha podido liberar.
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"El banco está cerrado por tiempo indefinido, ahorita hay puro cajero, no dijeron cuánto tiempo iban a estar así, pero lo cerraron por la obra, porque no pueden llegar los clientes en su carro", señaló el guardia de una sucursal bancaria.
Otro comerciante mencionó que en más de una ocasión la constructora a cargo a roto las tuberías de agua potable, que además de dejar a las colonias aledañas sin el líquido, se hace también encharcamientos.
"Van como tres veces que rompen un tubo, está todo el tiradero de agua que parece alberca, además van muy lentos, cambian y cambian las fechas y ya ni creemos que se vaya a terminar", mencionó.
Para poder introducir las tuberías, fue necesario cerrar también los accesos de las avenidas Gutiérrez Nájera, Emilio Barragán y de la colonia conocida como Ciudad Perdida.
Automovilistas y rutas del transporte urbano que transitan por alguna de estas avenidas tienen que rodear por la colonia Gabriel Leyva, por la calle 21 de Marzo, lo que ha provocado también un retraso en la frecuencia de paso.
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