Mazatlán, Sin.- ¿Qué hace un músico cuando no toca? Se desempeña como albañil, de chofer de taxi, de lava carros, entre otros oficios que le permitan llevar algo de dinero a su casa. Desde mayo, por la pandemia del Covid-19, así están los filarmónicos agremiados al sindicato en Mazatlán, "olvidados" por las autoridades, viviendo de prestado y hasta pidiendo ayuda en las calles de la ciudad.
Y ahora con la suspensión de permisos para las tradicionales posadas navideñas, volverán a ser los más afectados, así como también los meseros y organizadores de banquetes de comida, advirtió Marco Antonio Gordoa Obeso.
El secretario del Sindicato de Músicos de Mazatlán consideró que de las personas que trabajan en el gremio de la música, dependen de manera económica entre 1 mil 800 y 2 mil familias.
Gordoa Obeso comentó que podrían verse obligados de nueva cuenta a salir a ejercer la actividad en las calles, semáforos y glorietas de la ciudad, para tratar de subsistir, ante la falta de trabajo al no haber permisos para eventos.
"Para nosotros sería malo, porque el trabajo decrecerá y debido a esos siete meses que estuvimos sufriendo por la pandemia, ante la falta de dinero, sería algo lamentable", dijo.
Admitió que este gremio ha sido muy afectado por el Covid-19. Primero fue el aislamiento y ahora con las restricciones para que puedan realizar su trabajo, "ya no hayan la puerta".
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El dirigente de los músicos agregó que pueden realizar la actividad, siempre y cuando se cumpla con todos los protocolos sanitarios para prevenir contagios, pero el Ayuntamiento de Mazatlán anunció que no otorgará permisos para la celebración de posadas, para evitar aglomeraciones por la pandemia.
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