Culiacán, Sin.- La alta demanda de alimentos que hay en Sinaloa por la pandemia puede provocar que en el futuro cuando disminuyan los estragos de salud, aumenten los económicos y alimenticios, por las personas que han durado de dos a tres meses sin ingresos a causa de la enfermedad, informó, Daniel Tapia Sánchez.
El director del Banco de Alimentos comentó que por un año han rebasado la capacidad de la institución para apoyar a familias con la entrega de despensas, por factores como el repunte de contagios, pérdida de empleo y que las personas están conociendo su labor.
En el año y medio de la pandemia, el Banco de Alimentos ha sido testigo de cómo las familias se han visto obligadas a buscar ayuda en instituciones, autoridad municipal y estatal para tener comida.
En ese contexto y con el alza de solicitudes que han recibido en la tercera ola de contagios, Tapia Sánchez, reconoció que difícilmente podrán atender a las personas que enfrenten un estrago económico, por lo que, considera como necesario que el Gobernador electo, Rubén Rocha Moya, integre este tema en su agenda.
“Entiendo que la prioridad ahorita sea el tema de salud, sin embargo, yo creo que ya debería estar pensando, sobre todo el nuevo gobierno, en que estrategias va a seguir en conjunto con el Banco de Alimentos de Culiacán para atender los estragos económicos y alimenticios que está ocasionando el Covid”, expresó.
Explicó que los estragos económicos van a afectar principalmente a las familias de escasos recursos y a pesar de que no tienen una estimación de cuándo podría reflejarse este problema, dijo que, durante la pandemia, el tiempo que consideran que va a bajar la demanda, este solo repunta.
“Nosotros pensamos que de repente con la reactivación económica iba a bajar la demanda, pero no, la demanda no ha bajado desde hace más de un año y medio, nosotros rebasamos nuestra capacidad y demanda desde julio del año pasado”, precisó.
En ese sentido, reconoció que están muy prontos a llegar a un límite en donde pueden cerrar por completo la atención a nuevas familias y, por ende, se puede desencadenar una urgencia en alimentación, rubro en donde el gobierno municipal y estatal tendrán que crear una estrategia de apoyo.
Tapia Sánchez, detalló que actualmente hay un repunte similar en las solicitudes como cuando inició la contingencia con miles de familias que requieren de la ayuda, sin embargo, al ya tener un padrón de entre 35 y 40 mil beneficiarios al mes, prevén que solo podrán respaldar al 50 por ciento de los nuevos interesados.
Recalcó que el aumento en las solicitudes también se da por comunidades enteras y por familias que fueron remitidas por DIF municipal y estatal e instituciones más pequeñas del estado.
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