Mazatlán, Sin.- Controlar la diabetes, la hipertensión, la dislipidemia (colesterol y triglicéridos) y la obesidad sí es posible a corto plazo, si el paciente recibe un tratamiento multidisciplinario e integral como el que ofrece la Unidad de Especialidades Médicas de Enfermedades Crónicas desde hace casi 10 años, asegura el doctor José Luis Nambo Fuentes, coordinador de la UNEME en Mazatlán.
Señala que el éxito del tratamiento es del 80%, mientras que en el resto de los pacientes no se cumple por falta de disciplina personal y por factores socioeconómicos y culturales.
“La atención en esta Unidad es más personalizada, aquí se le dedica su tiempo a cada paciente y se le mira a los ojos; ellos prefieren venir acá porque los atendemos por un periodo de un año, en ese tiempo el paciente tuvo que haber aprendido a controlar su enfermedad, comprometiéndose de alguna manera a seguir todas las indicaciones y a tomar sus medicamentos para el control de los niveles de azúcar, colesterol, triglicéridos, presión arterial y el peso, así que sí es posible lograrlo”, expresó.
Desde la primera cita, al paciente se le elabora su expediente y recibe consulta en cuatro áreas, incluyendo enfermería, nutrición, sicología y medicina especializada. La unidad médica cuenta con servicio de tomas laboratoriales y en caso de requerirse, el paciente es canalizado a hospitales o centros de salud ante cualquier complicación de la enfermedad.
Al día, la UNEME con sede en Mazatlán puede atender hasta 12 pacientes, ya que a todos se les dedica el tiempo suficiente en las 4 consultas que recibe por cita.
A partir de este año, la Unidad de Especialidades Médicas de Enfermedades Crónicas amplió su servicio no sólo a la población abierta sin seguridad social, sino también a derechohabientes de cualquier institución de salud para que reciban atención multidisciplinaria, ante el cierre de este servicio en hospitales debido a la pandemia del coronavirus.
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Nambo Fuentes, médico especialista con 6 años de servicio en la UNEME, comenta que esta Unidad tuvo su apertura el 1 de julio de 2012 y desde entonces se trabajó con la población abierta o gente afiliada al extinto programa de Seguro Popular, ofreciendo incluso el servicio de medicina, con una gran demanda.
Sin embargo, con la pandemia del coronavirus, la demanda se redujo a un 50 o 60%, ya que los pacientes que atiende esta unidad médica son de los más vulnerables a Covid-19 y por temor o miedo, la gente dejó de acudir.
Actualmente, se atienden un promedio de 115 a 126 pacientes mensuales, es decir, un promedio máximo de 6.3 personas, pues la atención es de lunes a viernes, cuando la capacidad del servicio es hasta de 12 pacientes.
“La pandemia del coronavirus nos afectó en afluencia alrededor del 50 y 60%, pero contando con el antecedente de que son pacientes de mucho riesgo en este tipo de enfermedades, ya que atendemos diabéticos e hipertensos, y tienen mucho miedo a salir y contagiarse”, apuntó.
Indicó que en este año, la demanda se está recuperando al incluir derechohabientes de cualquier institución de salud, quienes ahora prefieren seguir su tratamiento con ellos pues la atención es más personalizada y multidisciplinaria.
Detección temprana
El objetivo de la Unidad de Especialidades Médicas de Enfermedades Crónicas es prevenir complicaciones en pacientes que padecen diabetes e hipertensión, obesidad, colesterol y triglicéridos, principalmente.
En estos tiempos de pandemia, estas unidades médicas ofrecen también consulta o asesoría vía telefónica a la población abierta o a los afiliados de cualquier institución médica, ya que se trata de pacientes que no deben de bajar la guardia en sus tratamientos y evitar cualquier tipo de complicación. El número telefónico de atención es 669-257-3888.
Entre las tareas del personal está realizar acciones de detección temprana en centros comerciales o supermercados, donde se instalan módulos con todo el equipo completo para checar niveles de peso, lípidos, glucosa y presión arterial.
“A las personas que acuden a estos módulos les realizamos un cuestionario para ver qué probabilidades de riesgo tienen ellos, se les checa sus niveles de peso, lípidos, el colesterol, la glucosa, la presión arterial, y los invitamos a que vengan”.
En estas visitas externas, se realizan pruebas rápidas de glucosa, presión arterial, toma de peso corporal y medición de la circunferencia abdominal, en las que se recomienda prácticas de actividad física de acuerdo a la edad y condición de cada paciente, además de darles pláticas de nutrición.
Bajo control
Para José Luis Nambo, el propósito de recibir un tratamiento multidisciplinario, es que el paciente despeje todas sus dudas y aprenda a tratar su enfermedad a corto plazo.
“Al año ya deben de estar controlados, es lo que se espera de la mayoría de los pacientes haga, claro que hay pacientes buenos y malos, pacientes que se le controla al mes y pacientes que todo el año no se controlan porque no se disciplinan, pero también tiene mucho que ver con el factor socioeconómico y sociocultural de los pacientes”, indicó.
Refiere que de acuerdo a la experiencia en estos años de servicio, la tendencia es que entre menos escolaridad y menos recursos económicos tenga el paciente, es más difícil lograr resultados en el tratamiento.
“Aquí el objetivo es que aprenda el paciente a tratar su enfermedad y que despejen todas las dudas que tengan, aquí siempre los invitamos a que hagan eso, pero a veces el paciente mientras menos escolaridad tenga es más difícil tratar de educarlo, mientras menos recursos económicos tenga, a veces, no se puede meter a la dieta, ese también es un factor que afecta”.
Comentó que ante el cierre de los servicios de atención de especialidades en los hospitales públicos, como consecuencia de la pandemia del coronavirus, las clínicas de especialidades médicas de enfermedades crónico degenerativas (UNEME), que dependen de la Secretaría de Salud, se convierten en una buena opción para los derechohabientes que quieran seguir con el tratamiento de la diabetes, hipertensión, dislipidemia y la obesidad.
“El llamado es a que la gente con este tipo de enfermedades se acerque y se cheque para que se le dé una atención multidisciplinaria e integral. A partir de este año, entre febrero y marzo, se dio la nueva indicación de que podíamos atender a derechohabientes de todas las instituciones de salud, así que las puertas están abiertas para todos”, concluyó.
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