"A cincuenta el kilo ¿cuánto le pongo?": el pajarito llegó a Mazatlán

A través de un video, pescadores de Playa Norte, compartieron la llegada del pez pajarito a las aguas mazatlecas, el cuál ya es toda una tradición culinaria en el puerto por su exquisito sabor, considerado un "manjar marino"

Carla González | El Sol de Mazatlán

  · lunes 25 de abril de 2022

El pajarito llegó a Mazatlán. Foto: Fausto McConegly | El Sol de Mazatlán

Mazatlán, Sin.- "A cincuenta el kilo, ¿cuánto le pongo?", pregunta un pescador, mientras recoge a puños desde el fondo de la panga decenas y decenas de pececillos. "Dicen que es un manjar aquí en Mazatlán", menciona otra voz, entretanto las personas se acercan alrededor de la lancha para observar. El pajarito llegó a Mazatlán.

A través de un video, pescadores de Playa Norte, compartieron la llegada del pez pajarito a las aguas mazatlecas, en la primera zafra se logró capturar 800 kilos de este producto, el cual ya es toda una tradición culinaria en el puerto por su exquisito sabor y que le ha válido para ser considerado un "manjar marino".

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Por lo general, la zafra de esta pececillo inicia a principios de mayo y dura alrededor de un mes a mes y medio, por lo que se vuelve irresistible tanto para los pescadores, por las ganancias económicas que genera, como para quienes gustan de comerlo por su buen sabor.

A diferencia de otras pescas, donde el producto llega fresco por la mañana, el pajarito se captura de noche. Es un pez pequeño, delgado, de unos 30 centímetros de largo, su coloración es verde azul oscuro en la parte de lomo, plateado en los costados y blanco en el vientre.

Actualmente, el kilo de pescado se está comercializando a 50 pesos, aunque el precio puede variar según la captura y su demanda.

Esta especie se dispersa por todo el litoral del Pacífico, se le puede encontrar en los estados de Nayarit, Sonora y Sinaloa, aunque en Mazatlán tiene más renombre para su comercialización y consumo.

La arribazón masiva de estos peces, qué ocurre una vez al año, es para aparearse; hembras y machos hacen un nado nupcial donde las hembras liberan sus huevecillos, que al ser atrapados por las redes de los pescadores este acto se ve interrumpido.

Desafortunadamente, no hay leyes que regulan la captura del pajarito, el único límite de su pesca es la capacidad de carga de las pangas.