/ miércoles 20 de mayo de 2020

Ricardo Lizárraga Granados, un adiós con aroma de café

El fundador de Café El Marino fue un gran visionario empresarial

Mazatlán, Sin.- Don Ricardo Lizárraga Granados, fundador de Café El Marino, quien falleció este miércoles a los 93 años de edad, fue un hombre visionario desde su juventud, al lograr consolidar una empresa de gran éxito, no sólo en México, sino también en Estados Unidos y Latinoamérica.

El hijo menor del matrimonio formado por Juan Lizárraga y Amada Granados, desde sus primeros años de vida ayudó a su padre en las labores de campo en El Verde, Concordia.

En 1950 llegó a Mazatlán, y poco después inició su negocio de café en La Faja de Oro y La Gaceta Comercial, comenzando la aventura que lo marcaría por toda su vida.

Con tan sólo 43 kilos de café, forjó su futuro comercial en una modesta molienda del Mercado Pino Suárez; fue ahí donde, con mucho trabajo y esfuerzo, inicia una de las empresas más importantes de México, Café El Marino.

Se casó con Yolanda Mercado Escutia, con quien procreó cinco hijos, Javier, Ricardo, Juan Carlos, Arturo y Yolanda.

Gracias a su visión empresarial, Don Ricardo logró que Café El Marino se convirtiera en uno de los engranajes principales de la economía porteña, y fuente de trabajo para cientos de familias de la región.

Te puede interesar: Fallece Ricardo Lizárraga, fundador de Café El Marino

Era papá de Javier Lizárraga Mercado, actual secretario de Desarrollo Económico del Gobierno de Sinaloa.

En los hogares de muchos mexicanos seguirá la presencia de Don Ricardo, al prepararse una buena taza de café. Mazatlán seguirá oliendo a grano recién tostado. ¡Gracias! Descanse en paz.








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Mazatlán, Sin.- Don Ricardo Lizárraga Granados, fundador de Café El Marino, quien falleció este miércoles a los 93 años de edad, fue un hombre visionario desde su juventud, al lograr consolidar una empresa de gran éxito, no sólo en México, sino también en Estados Unidos y Latinoamérica.

El hijo menor del matrimonio formado por Juan Lizárraga y Amada Granados, desde sus primeros años de vida ayudó a su padre en las labores de campo en El Verde, Concordia.

En 1950 llegó a Mazatlán, y poco después inició su negocio de café en La Faja de Oro y La Gaceta Comercial, comenzando la aventura que lo marcaría por toda su vida.

Con tan sólo 43 kilos de café, forjó su futuro comercial en una modesta molienda del Mercado Pino Suárez; fue ahí donde, con mucho trabajo y esfuerzo, inicia una de las empresas más importantes de México, Café El Marino.

Se casó con Yolanda Mercado Escutia, con quien procreó cinco hijos, Javier, Ricardo, Juan Carlos, Arturo y Yolanda.

Gracias a su visión empresarial, Don Ricardo logró que Café El Marino se convirtiera en uno de los engranajes principales de la economía porteña, y fuente de trabajo para cientos de familias de la región.

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Era papá de Javier Lizárraga Mercado, actual secretario de Desarrollo Económico del Gobierno de Sinaloa.

En los hogares de muchos mexicanos seguirá la presencia de Don Ricardo, al prepararse una buena taza de café. Mazatlán seguirá oliendo a grano recién tostado. ¡Gracias! Descanse en paz.








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