Mazatlán, Sin.- Sin una capacitación previa como la que recibieron maestros, padres de familia con hijos que tienen alguna discapacidad aprenden sobre la marcha a manejar el internet y las plataformas para sacar adelante a sus hijos en la nueva normalidad que incluye clases virtuales, señaló la presidenta de la Red de Padres con Hijos con Discapacidad de Mazatlán, Hilda Guillén Ledezma.
Dijo que para los padres resulta muy complicado aprender las nuevas tecnologías, pero la mayoría busca asesorarse con tutoriales en el internet o acercándose a quienes saben más de esto, pues tienen que ayudar a sus hijos no sólo a abrir las videollamadas, sino también a enviar las tareas que le dejan los maestros.
“Está complicado, desesperante y de mucho estrés, estamos igual que los maestros, aunque ellos recibieron una capacitación previa, nosotros no, como padres estamos haciendo todo lo posible, aprendiendo sobre la marcha”, expresó.
Refirió que es medio frustrante para la persona que nunca han operado una computadora, hacerlo de “buenas a primeras” para ayudar a sus hijos con discapacidad que están en nivel medio, medio-superior y superior.
Lo que más se les complica a los padres con hijos discapacitados, agregó, es entrar a las plataformas y moverse en ellas, así como el envío de tareas.
Hilda Guillén asegura que las clases virtuales en el sistema educativo de la nueva normalidad tienen sus pros y sus contras, ya que algunos padres de familia están contentos porque sus hijos con discapacidad no tienen que salir a la calle y exponerse a los peligros de las barreras urbanas; sin embargo, para otros es un “dolor de cabeza” adaptarse a las nuevas tecnologías.
“Unos están contentos porque no salen a la calle, pero depende de cada discapacidad, son chicos que están teniendo videollamadas, se les enseña a bajar el enlace, lo complicado es que tienen que enviar tareas y hacer examen de manera virtual, y eso es más complejo para algunas discapacidades”, apuntó.
En el caso de Joselin, su hija, que tiene discapacidad visual, e ingresó a primer año de preparatoria, lo complicado ha sido dominar la plataforma y enviar las tareas.
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Y añadió que su hija recibirá apoyo de personal capacitado para enseñarle a usar los programas y dispositivos, y pueda hacerlo ella sola.
Joselin, al igual que otros estudiantes con discapacidad, tendrá que adaptarse a la nueva normalidad que incluye clases virtuales y aprender a manejar las tecnologías, mientras no baje la incidencia del coronavirus u vuelvan las clases presenciales.
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