Mazatlán, Sin.- A casi dos meses de iniciada la veda del camarón en el Pacífico mexicano, el muelle pesquero luce con muy poca actividad en la reparación de embarcaciones.
El Parque Bonfil luce desolado, pues son contados los barcos en los que se realizan trabajos de mantenimiento por falta de recursos, lo que mantiene en la incertidumbre a los pescadores.
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Luego de un recorrido por el muelle se constató que de una flota de 480 barcos camaroneros, hasta el momento son alrededor de cinco en los que se está trabajando, debido a que los armadores no tienen dinero ni apoyos por parte del gobierno federal.
"Todo esto está solo, aquí asustan oiga, son contados los barcos que son reparados en estos momentos, los dueños no tienen dinero, ni tampoco de dónde sacar, la situación es muy crítica para el sector, no sabemos que va a pasar", dijo Ernesto, velador del muelle.
Explicó que la reparación en los barcos depende de las posibilidades de cada armador, la soldadura varía en cada embarcación, unas dan mantenimiento a motores o a cuestiones de refrigeración, que es lo básico.
El velador estimó que será a mediados de julio cuando empiecen a repuntar los trabajos y mantenimiento en las embarcaciones camaroneras.
Agregó que en esta temporada de veda la mayoría de los pescadores se han empleado en otras actividades, como la construcción y el turismo, para poder llevar el sustento económico a sus familias.
La fecha
La veda temporal del camarón en el Pacífico Mexicano inició el pasado 23 de marzo, medida que tiene como objetivo asegurar el reclutamiento de los organismos a las zonas de crianza y crecimiento, a fin de favorecer la continuidad de sus poblaciones para su aprovechamiento en la próxima temporada de pesca 2023-2024, que arrancará a mediados de septiembre.
