Mazatlán, Sin.- Durante las últimas tres semanas la playa de Olas Altas ha sido fuertemente contaminada por un vertedero de drenaje que llega directamente al mar sin que las autoridades hagan algo al respecto.
Esta zona fue boletinada por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, luego de que el muestreo de Playas Limpias que realizó en el mes de diciembre arrojó como resultados que no era apta para uso recreativo ante altos índices de contaminación por bacterias fecales.
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El 17 de diciembre, la Cofepris realizó el estudio y la zona fue cerrada al público; sin embargo, el 23 de diciembre la Secretaría de Salud de Sinaloa informó que todas las playas mazatlecas eran aptas para el disfrute público, tras reforzar las medidas de prevención y monitoreo de la calidad del agua.
A través de un comunicado, se dio a conocer que las muestras de agua tomadas los días 15, 18 y 19 de diciembre arrojaron resultados favorables para el uso recreativo, según los estándares sanitarios vigentes en Sinaloa. Estas acciones fueron coordinadas por el Ayuntamiento de Mazatlán, a través de la Jumapam.
"De acuerdo a los nuevos resultados obtenidos del estudio al muestreo de agua tomado de las playas mazatlecas los días 15,18 y 19 de diciembre arrojaron que la zona muestreada es apta para el disfrute público, quedando al comité de playas la decisión o la iniciativa de reabrir la playa", se informó en el comunicado.
La playa fue reabierta y al parecer las cosas volvieron a la normalidad, pero solo en apariencia, ya que los derrames de aguas negras continúan por fallas en el colector Roosevelt. En las últimas tres semanas, al menos en tres ocasiones el drenaje ha llegado directo al mar, en un grave acto de contaminación que ha sido ignorado por las autoridades.
El director de Obras Públicas de Mazatlán, Rigoberto Aramburo Bojorquez, atribuye la crisis a una combinación de factores, incluyendo obstrucciones en el sistema de drenaje causadas por la acumulación de grasas provenientes de los restaurantes de la zona.
"El tema, como se comenta, es multifactorial, se han detectado en Paseo Olas Altas colapsos a raíz de taponamientos de la red por grasas que los restaurantes de la zona echan a las tuberías, ya se han hecho recorridos con Jumapam para darle mantenimiento debido a la red", explicó.
Especifica que la situación se agrava debido al desarrollo inmobiliario descontrolado que se tiene en los alrededores de Olas Altas.
"Es parte de todo, el drenaje que ya es muy antiguo, la grasa de los restaurantes, como ya comentaba y la construcción de edificios, es parte de lo que nos tiene en esta problemática", añadió.
Para el ambientalista Ángel García Contreras esta situación no solo afecta la salud pública, sino también el turismo y a la vida marina.
"A corto plazo da mala imagen, a mediano plazo solamente prepárate para ver turismo de bajo perfil y a largo plazo puede ser un factor mortal para la vida marina de la zona, tal y como sucedió hace poco más de un año en el Estero del Yugo, estamos al borde del colapso", enfatizó.
La clausura de la planta de tratamiento de aguas residuales El Crestón en 2023 ha agravado el problema, dejando a la zona costera vulnerable a la contaminación y poniendo en riesgo la reputación turística de Mazatlán, según el ambientalista.
"Esa planta trataba 600 litros por segundo, se agravó cuando se retiró, afecta muchísimo en la demanda turística, la mala imagen, el vertimiento de aguas residuales le corresponde a Conagua, estamos viendo las parálisis de esas instancias federales, no hay nada para contenerla ni sancionar esa acción", lamentó.
La problemática es grave, la contaminación de las playas podría alejar al turismo y dañar gravemente la imagen que actualmente tiene Mazatlán, que está convertido en uno de los destinos turísticos más visitados del país.
"Mazatlán puede correr un riesgo grave si siguen las cosas así, ya que va a ser difícil que en esta situación la ciudad atraiga a gente de mayor poder adquisitivo que provoque un mayor impacto económico en el puerto", puntualizó.
La situación del drenaje en Mazatlán está fuera de control, ya que en 20 años que lleva Cofepris realizando el muestreo de Playas Limpias, nunca una playa mazatleca había sido cerrada al público por contaminación.
