Mazaltán, Sin.- Con la llegada de la temporada de graduaciones, las tiendas de renta de trajes y vestidos para graduaciones en Mazatlán registran una fuerte demanda.
Según diversos negocios locales, la demanda de togas ha disminuido significativamente, mientras que la renta de trajes formales ha experimentado un aumento de hasta el 50 por ciento, especialmente entre los jóvenes universitarios.
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Propietarios de tiendas de renta en la ciudad han confirmado que las togas ya no son tan solicitadas, como en años anteriores.
"Los estudiantes prefieren mandar a hacer sus propias togas o simplemente no las usan, solo la quieren para un rato, pero prefieren tener el recuerdo", comentó Leonardo, encargado de una tienda de renta ubicada en la colonia López Mateos.
La tendencia parece estar cambiando, con muchos optando por personalizar su indumentaria o prescindir de la tradicional toga en favor de una apariencia más individualizada.
"Prefieren simplemente una camisa de manga larga y cosas así, la esencia y tradición ya no está, es por eso que los birretes y las togas ya no son tan solicitadas", mencionó Leonardo.
En contraste, los trajes formales están en auge.
Este incremento en la demanda ha sido notoriamente impulsado por los estudiantes universitarios que buscan estar impecables para sus ceremonias de graduación.
Los costos de renta de estos trajes varían según la marca y la calidad, oscilando entre 800 y mil 700 pesos.
"Hemos visto un crecimiento significativo en la renta de trajes este año. La gente está invirtiendo más en lucir bien para su gran día, los costos van desde los 800 hasta los mil 700 pesos, dependiendo de qué es lo que quieran y su presupuesto, nos ajustamos", añadió el arrendador.
Por otro lado, los vestidos de graduación, que anteriormente eran populares para rentar, ahora son comprados por las familias.
"Los padres prefieren comprar los vestidos para que las graduadas los conserven como un recuerdo especial”, mencionó Irma, quien trabaja en una tienda de arrendamiento en la calle Teniente Azueta, de la colonia Centro.
Esta tendencia refleja un cambio cultural hacia la conservación de memorias tangibles de momentos importantes en la vida de los estudiantes.
