Mazatlán, Sin. La situación para el sector pesquero de altamar en Mazatlán se torna cada vez más crítica, sobre todo luego de que en la recién terminada temporada de pesca, los productores no lograron sacar los gastos de operación.
Y es que el panorama es sombrío, con alrededor de 250 barcos que no han podido salir a la pesca desde hace tres años por los altos costos de operación, mismos que han dejado a miles de pescadores desempleados.
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El presidente de la Unión de Armadores del Litoral del Pacífico, Jesús Omar Lizárraga Manjarrez, reveló que debido a la situación desde 2019 se han puesto a la venta muchas de estas embarcaciones; sin embargo, son pocos los interesados debido a que se quiere de una considerable inversión y los costos de operatividad son muy altos.
"Desde hace algunos años las empresas y cooperativas pesqueras dejaron de tener la oportunidad de poder sacar sus embarcaciones a pescar, como consecuencia de la falta de apoyo, llevando a los productores a conseguir ganancias a través de la venta de sus propias embarcaciones", dijo.
Lizárraga Manjarrez mencionó que la mayoría de las embarcaciones en todo el país son embarcaciones que hace cinco años estaban en condiciones de poder navegar, pero debido a que gran parte no ha tenido recurso para salir a pescar, han pasado hasta tres años detenidas en los muelles.
Sin oportunidades
Ante el desempleo en el sector, los pescadores han tenido que buscar trabajo como agentes de seguridad, albañiles, mecánicos, entre otros
La crisis no solo afecta a los pescadores, sino también a los comerciantes de insumos del área del Parque Bonfil y a los 22 puestos con venta de comida que se mantienen prácticamente cerrados.
La flota de Mazatlán está compuesta por 500 barcos, de los cuales solo la mitad logró salir a las capturas durante la pasada temporada de pesca, de las cuales solo el 20 por ciento logró culminarla, ya que la gran mayoría solo realizó el primer viaje.