Para nadie es un secreto la crisis que vive el sector pesquero en la entidad y en el País.
Desde su perspectiva, en este sexenio quedaron descobijados por una política pública que no les brindó una mejor calidad de vida en conjunto con la actividad y sus familias.
Otrora un sector fuerte en la actividad económica regional, hoy se asumen como comerciantes a punto de ser liquidados por los “vaivenes” del mercado.
En este escenario el ingreso de camarón ilegal proveniente del extranjero se convirtió en el principal enemigo del sector acuícola en Sinaloa.
De acuerdo con cálculos de productores acuícolas, su tiempo promedio de supervivencia es de dos meses, a lo mucho.
Con este escenario apocalíptico no hay un clima de certeza para quienes se dedican a esta actividad frente a la competencia de la industria pesquera tradicional.
¿Ahora que viene?, ¿navegar en esas aguas turbulentas y tomar las calles para meter presión para que las autoridades atiendan al sector?
Fracaso en lavado de dinero
En el 2019 el gobierno federal todavía encabezado por Andrés Manuel López Obrador se preció de tener una estrategia para atacar el lavado de dinero de los carteles mexicanos.
Con Santiago Nieto al frente de la Unidad de Inteligencia Financiera ordenaron bloquear más de 2 mil cuentas bancarias nada más a integrantes (o presuntos) del Cártel de Sinaloa, pero en realidad el Estado nunca ganó nada.
Hasta el momento en El Sol de Sinaloa ha logrado documentar como familiares de capos han luchado en tribunales de manera legal para liberar sus cuentas bancarias, y es recurrente que ganen los casos por la sencilla razón que la UIF no va más allá de emitir la lista negra, pero el ministerio público federal, que debe investigar y comprobar el lavado de dinero o la operación con recursos de procedencia ilícita, no hace su trabajo.
En los juicios hay familiares del Mayo Zambada, de los Guzmán y de otros personajes considerados como líderes de facción. Hay empresas y negocios que tienen años operando pero no sucede nada.
En esta edición contamos una de esas historias, la nieta de Joaquín Guzmán que se ha lanzado al estrellato como intérprete de música regional.
