/ lunes 15 de enero de 2024

Incertidumbre alimentaria

De acuerdo con el Colegio de Economistas de Sinaloa, presidido por la doctora Cristina Ibarra, la falta de agua en las presas, las siembras que no alcanzaron el 100 por ciento de un ciclo normal, empatado con otras situaciones externas, están provocando una incertidumbre en el tema agroalimentario en el estado.

Estamos en plena cuesta de enero, y si bien la inflación oficial ronda el 4.6 por ciento, lo cierto es que los productos básicos ya tienen un incremento, y se espera que conforme avance el 2024, pueden aumentar todavía más debido a la escasez.

Dos de estos, básicos en la alimentación de los sinaloenses, el tomate y el frijol, que de acuerdo con una revisión de El Sol de Sinaloa, de 2023 al 2024, ya tienen reflejado un 42 y un 31 por ciento, y si bien cuando hay cosechas estos productos suelen bajar, lo cierto es que la mala temporada de siembra -prevén comerciantes y la doctora Ibarra- los encarezca más.

Pero hay otro filo. Y ese es el que se observa ya en los mercados locales, ya que locatarios del Garmendia se quejan que empiezan mal las ventas del año, con baja afluencia, y que la conclusión del paso no fue de lo mejor.

Desde luego este golpe es multifactorial. No se debe a un solo motivo, lo mismo que el encarecimiento de la vida. Si bien el gobierno federal buscó paliar el aumento con un mejor salario mínimo por decreto, se resiente que los mejores salarios serán prácticamente tragados por la inflación.

El panorama en el campo no resulta halagüeño, pero la economista Cristina Ibarra sostiene que tampoco lo tiene la pesca y otros sectores productivos, por lo que se requerirían 25 mil millones de pesos para lograr evitar que la crisis desborde. Economizar y ahorrar, un método de aminorar esta cuesta de enero.

En riesgo la exportación de camarón

La situación en el sector pesquero de Mazatlán es alarmante y cada vez se pone peor. Actualmente, de las nueve plantas procesadoras que existen en el puerto solo seis tienen trabajo debido a que los barcos camaroneros llegan con poca producción.

La crisis ya golpeó a los patrones de barco, a los pescadores, a las mujeres empacadoras, prácticamente a todos los que están involucrados en la actividad, pero ahora también peligran las exportaciones a Estados Unidos, que podrían caer al 50 por ciento.

Y es que a la difícil situación que se tiene en México y Sinaloa se le suma también la competencia y la crisis económica que se vive en el país vecino, lo que ha provocado que se empiecen a cancelar pedidos en la entidad.

El 70 por ciento de la producción camaronera del estado se vende a Estados Unidos, ya que es el principal comprador de camarón a nivel mundial, con 600 mil toneladas al año y si ellos no compran es muy difícil acomodar el producto en otros países.

Aquí lo que hace falta es que el gobierno federal voltee a ver a la pesca y que se etiqueten más recursos. El sector pesquero necesita un rescate real, ya que la falta de apoyos y los altos costos de producción lo tienen a punto del colapso.

Actualmente de 480 barcos que integran la flota mazatleca, menos de la mitad sale a pescar y solo alrededor de 100 completan la temporada. Si no se hace algo pronto, la actividad irá desapareciendo poco a poco por ser incosteable. Esa es la realidad.

De acuerdo con el Colegio de Economistas de Sinaloa, presidido por la doctora Cristina Ibarra, la falta de agua en las presas, las siembras que no alcanzaron el 100 por ciento de un ciclo normal, empatado con otras situaciones externas, están provocando una incertidumbre en el tema agroalimentario en el estado.

Estamos en plena cuesta de enero, y si bien la inflación oficial ronda el 4.6 por ciento, lo cierto es que los productos básicos ya tienen un incremento, y se espera que conforme avance el 2024, pueden aumentar todavía más debido a la escasez.

Dos de estos, básicos en la alimentación de los sinaloenses, el tomate y el frijol, que de acuerdo con una revisión de El Sol de Sinaloa, de 2023 al 2024, ya tienen reflejado un 42 y un 31 por ciento, y si bien cuando hay cosechas estos productos suelen bajar, lo cierto es que la mala temporada de siembra -prevén comerciantes y la doctora Ibarra- los encarezca más.

Pero hay otro filo. Y ese es el que se observa ya en los mercados locales, ya que locatarios del Garmendia se quejan que empiezan mal las ventas del año, con baja afluencia, y que la conclusión del paso no fue de lo mejor.

Desde luego este golpe es multifactorial. No se debe a un solo motivo, lo mismo que el encarecimiento de la vida. Si bien el gobierno federal buscó paliar el aumento con un mejor salario mínimo por decreto, se resiente que los mejores salarios serán prácticamente tragados por la inflación.

El panorama en el campo no resulta halagüeño, pero la economista Cristina Ibarra sostiene que tampoco lo tiene la pesca y otros sectores productivos, por lo que se requerirían 25 mil millones de pesos para lograr evitar que la crisis desborde. Economizar y ahorrar, un método de aminorar esta cuesta de enero.

En riesgo la exportación de camarón

La situación en el sector pesquero de Mazatlán es alarmante y cada vez se pone peor. Actualmente, de las nueve plantas procesadoras que existen en el puerto solo seis tienen trabajo debido a que los barcos camaroneros llegan con poca producción.

La crisis ya golpeó a los patrones de barco, a los pescadores, a las mujeres empacadoras, prácticamente a todos los que están involucrados en la actividad, pero ahora también peligran las exportaciones a Estados Unidos, que podrían caer al 50 por ciento.

Y es que a la difícil situación que se tiene en México y Sinaloa se le suma también la competencia y la crisis económica que se vive en el país vecino, lo que ha provocado que se empiecen a cancelar pedidos en la entidad.

El 70 por ciento de la producción camaronera del estado se vende a Estados Unidos, ya que es el principal comprador de camarón a nivel mundial, con 600 mil toneladas al año y si ellos no compran es muy difícil acomodar el producto en otros países.

Aquí lo que hace falta es que el gobierno federal voltee a ver a la pesca y que se etiqueten más recursos. El sector pesquero necesita un rescate real, ya que la falta de apoyos y los altos costos de producción lo tienen a punto del colapso.

Actualmente de 480 barcos que integran la flota mazatleca, menos de la mitad sale a pescar y solo alrededor de 100 completan la temporada. Si no se hace algo pronto, la actividad irá desapareciendo poco a poco por ser incosteable. Esa es la realidad.