Mazatlán, Sin.- La reciente ola de violencia en Sinaloa, que comenzó el 9 de septiembre, ha provocado una caída del 40 por ciento en las ventas del mercado José María Pino Suárez de Mazatlán.
Según Roberto Vega, presidente de la mesa directiva del mercado, la disminución comenzó días después del inicio de los hechos violentos, afectando a comerciantes locales y negocios en toda la ciudad.
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"Ha caído la venta en los comercios del mercado, y no nada más en el mercado, sino de todo Mazatlán", señaló Vega, atribuyendo esta situación a la falta de turismo y clientela.
El impacto económico ha sido evidente, y aunque los locatarios aseguran no temer por su seguridad, sí sienten los efectos directos de la violencia en sus bolsillos.
"Nosotros no andamos haciendo cosas ilícitas, somos gente de trabajo, pero nos afecta que no lleguen visitantes a Mazatlán", explicó Vega.
Con la cercanía de temporadas altas de ventas, como el Día de Muertos, los comerciantes ven con preocupación la posibilidad de que la situación de violencia no mejore, lo que podría seguir afectando sus ingresos.
"Invertimos en nuestros comercios, y al momento de que no tenemos un repunte en el turismo, es una afectación económica", añadió Vega, al destacar la gravedad de la situación.
Los locatarios están a la espera de que se tomen medidas para mejorar la seguridad y recuperar el flujo de turistas y compradores en la ciudad, con la esperanza de que las ventas puedan recuperarse en el último trimestre del año.
