Culiacán, Sin.- La diputada Alma Rosa Garzón Aguilar propuso penas de seis meses hasta cuatro años de prisión a quien desatienda a un animal, ya que aseguró que cada vez con mayor frecuencia con en las ciudades perros y gatos son abandonados como burros y caballos en las comunidades.
La legisladora de Morena al presentar adiciones al artículo 365 al código penal y la fracción al artículo 78 de la Ley de Protección a los animales en Sinaloa para tipificar el delito de abandono animal imponiéndose una pena de un mes a dos años de prisión y una multa de cien a trescientas veces la unidad de medida y actualización, si no resultare daño alguno al animal, pero si resultare lesión o la muerte del mismo se impondría una pena de seis meses a cuatro años de prisión.
Las sanciones que estipula la ley podrían ser mayores si existe reincidencia y se acredita actos de crueldad. Lo lamentable es que, si se le acredita por primera vez el hecho, la sanción sería solo un apercibimiento, siendo que el abandono animal por su naturaleza implica un daño que podría inducir hasta la muerte del mismo. Es decir, se observa claramente que la sanción no corresponde al daño que le podrían causar al animal, además del hecho que esa laxidad en la ley no es un inhibidor de este hecho cruel.
A quien abandone un animal no humano, doméstico, de compañía o de trabajo, o aquél que ha sido criado y condicionado para acompañar al ser humano en su convivencia diaria, se le impondrá pena de un mes a dos años de prisión y multa de cien a trescientas veces la unidad de medida y actualización, si no resultare daño alguno.
Si del abandono a que se refiere el párrafo anterior, resultare lesión o la muerte del animal se aplicará una pena de seis meses a cuatro años de prisión, privando al sujeto activo, además, de la propiedad o posesión de cualquier especie animal.
Asimismo, será responsable de las lesiones o muerte que el animal no humano abandonado cause a terceros, así como de los daños en vía pública o espacios privados.
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Lamentó que muchos de los animales son abandonados fuera de sus lugares de residencia de manera intencionada por sus cuidadores u otros.
“Los perros y los gatos son los que presentan más comúnmente este tipo de crueldad, al ser mascotas; no obstante, cada vez es más amplia la variedad de animales que son usados con este fin, entre estos se encuentran reptiles, aves, roedores y animales exóticos de toda índole, y, por tanto, también están presentando altas tasas de abandono”, señaló.
Asimismo, agregó que también es común que en las comunidades rurales se dé el abandono de caballos, mulas y burros una vez que, termina su vida laboral útil en las faenas del campo.
Lamentablemente, en el estado y en el país no existen datos exactos del abandono animal porque no hay un sistema de contabilidad estadística, pero algunas asociaciones protectoras de animales presentan datos alarmantes. Por ejemplo, la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies estima que existen 28 millones de mascotas en el país y un 70 % están en situación de calle, indicó.
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