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El Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero (CESF) advirtió de riesgos para los mercados en el país derivados de los efectos que la crisis sanitaria del coronavirus está teniendo sobre la actividad económica.
De acuerdo con el organismo que preside el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, a más de tres meses que comenzó el confinamiento y el cierre de industrias por la pandemia, en el país prevalece la incertidumbre sobre la profundidad de la contracción de la economía nacional y la velocidad de la recuperación.
La gradualidad en la reapertura de los sectores económicos, con el fin de evitar el incremento en los contagios de la enfermedad, alimentan esta incertidumbre, a la que se le suman las recientes bajas en las calificaciones crediticias de Pemex y de la nota soberana de México, indicó el CESF en un comunicado.
Según el organismo, esta situación, aunada al riesgo de una mayor desaceleración de la economía global y un incremento de la volatilidad en los mercados financieros internacionales así como una recomposición de flujos hacia activos de menor riesgo, trae retos importantes para el sistema financiero mexicano, entre ellos el de contar con buenas condiciones de operación y mantener un funcionamiento apropiado de los sistemas de pagos.
Para atenuar los efectos de la crisis, el CESF subraya la necesidad de evitar las instituciones financieras reacciones de manera que amplifiquen los problemas de liquidez y operatividad que puedan enfrentar los agentes económicos, también hace un llamado a mantener el flujo de crédito que requieren las empresas, los hogares y algunos intermediarios financieros, conservando las condiciones de liquidez adecuadas, tanto en moneda nacional como extranjera.
El organismo que integra a miembros del Banco de México y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, hace un llamado a evitar que los agentes económicos solventes vean comprometida su situación a causa de problemas de liquidez y a gestionar de forma adecuada el aumento en los riesgos de mercado, crédito y operativos de las instituciones financieras.
De acuerdo con el CESF, las revisiones a la baja de las perspectivas de crecimiento económico y la mayor aversión al riesgo generaron un importante ajuste de portafolios y una marcada volatilidad en los mercados financieros mundiales y nacionales, sin embargo, destacó la respuesta de las autoridades, en particular la de bajar las tasas de interés y disminuir las primas de riesgo, lo que ha llevado a una apreciación del tipo de cambio.
También apuntó que las autoridades han implementado medidas que incentivan el flujo continuo de financiamiento a la economía y fomentan el comportamiento ordenado de los mercados financieros.
El balance de riesgos que realizó el organismo añade que algunos intermediarios del país mostraron un aumento en la percepción del riesgo de crédito y de fondeo para las instituciones.
No obstante, destacó que las pruebas de estrés publicadas en junio en el Reporte de Estabilidad Financiera del Banxico señalan que, bajo los escenarios macroeconómicos adversos simulados, el sistema bancario mantendría su solvencia a nivel agregado.
“Lo anterior muestra que el sistema financiero mexicano en su conjunto enfrentó el inicio de la pandemia en una posición de liquidez y capital sólida”, indicó.
Sin embargo, el CESF concluyó que si bien la situación del sistema financiero se mantiene estable, persisten riesgos que podrían intensificarse y afectar el adecuado funcionamiento del mismo.
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