MOSCÚ.- La canción de un cómico ruso que se burla de la selección que disputará el Mundial y cuestiona el sentido financiero de organizar el evento se volvió viral en la víspera del torneo, algo que enfureció a algunos aficionados y políticos.
Escrita e interpretada por Semyon Slepakov, "Ole Ole Ole" imagina a Ramzan Kadyrov, el jefe de Chechenia respaldado por el Kremlin, como el nuevo pero fracasado conductor de la selección rusa. Ha sido visto más de 5 millones de veces en YouTube.
La canción de Slepakov ha tocado un nervio en Rusia, cuyo gobierno espera que la organización de la Copa del Mundo le dé un impulso en el escenario mundial a pesar de que su equipo es el peor ubicado en el ranking de la FIFA entre los 32 participantes.
Aprovechando las opiniones de muchos rusos que consideran que sus jugadores tienen un bajo rendimiento y cobran demasiado, la canción predice que Rusia perderá su primer partido 2-0 contra Arabia Saudita el jueves.
"Nuestro equipo es, seamos francos, una mierda", canta Slepakov.
Slepakov, un conocido productor de televisión, canta también sobre cómo la tensión de organizar la competencia absorbió todos los recursos de Rusia a pesar de que "las cosas no son tan geniales en el reino".
Treinta y dos equipos competirán en el torneo desde el jueves y hasta el 15 de julio, organizado en Rusia por primera vez en la historia a un costo oficial de 683,000 millones de rublos (unos 11 mil millones de dólares).
Muchos aficionados dijeron que encontraron la canción divertida, pero no todos le vieron el lado humorístico.
"Aún más vulgaridad", escribió un espectador que se hacía llamar Jora Sukhov en YouTube. "No sería tan divertido si no fuera tan triste", escribió otro, Vladislav Efremenko.
En tanto, un ministro del gobierno de Kadyrov dijo a una estación de radio de Moscú que pensaba que Slepakov debería pedir disculpas al equipo de fútbol ruso y a Kadyrov.
"Solo una cosa (en la canción) es ofensiva (...) el equipo dirigido por mí perdió. Eso no está bien. Ahora, antes de la Copa del Mundo, ellos (nuestros futbolistas) necesitan nuestro apoyo. No perdí las esperanzas en su victoria", escribió el propio Kadyrov.
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