Todo comenzó la mañana del 12 de agosto de 2017 cuando en Mazatlán nos despertamos inundados a consecuencia de la lluvia torrencial por la tormenta tropical “Jova”; los fuertes vientos derribaron árboles, anuncios espectaculares, cables de energía eléctrica, y dañaron obras de infraestructura municipal, entre ellas dos velarias que recién habían sido instaladas en el “Parque Lineal” Oscar Pérez Escobosa, al norte del puerto. ¿Por qué sale a la luz este tema?, acá les comparto que cuando hay voluntad política la sociedad gana, como ocurrió en este caso.
Debido a los daños en esas dos velarias, en ese tiempo las obras tenían vigente fianza de vicios ocultos, el Observatorio Ciudadano de Mazatlán A.C., como organización ciudadana que documenta la ruta del recurso público, investigó si la autoridad municipal concretamente la Dirección de Obras Públicas del Gobierno de Mazatlán, estaba haciendo lo procedente para exigir a las empresas contratistas la reposición como obras siniestradas o si estaba en trámite hacer efectivas las fianzas.
De nuestra investigación resultó que existían elementos suficientes para denunciar ante el Órgano Interno de Control por negligencia de la autoridad municipal, ya que habían pasado seis meses desde la caída de las velarias y no se reponían. La denuncia se presentó el primero de febrero de 2018, seis meses después del daño ocasionado por la tormenta tropical.
A diferencia de otras denuncias que, hasta ese momento el Observatorio había presentado, el Órgano Interno de Control resolvió en dos meses y en su resolución la competencia del reclamo recayó en la Secretaría del Ayuntamiento, a quien le envió la investigación. Dos meses después de presentar la denuncia, en abril de 2018, la Secretaría del Ayuntamiento abrió la investigación, misma que concluyó un hasta octubre de 2019, en ésta determinó que la responsabilidad era efectivamente de las empresas contratistas que instalaron las velarias y ordenó que en un plazo de 30 días las repusieran.
Sin embargo, las empresas no respondieron a la exigencia de la autoridad, ante ello el Observatorio Ciudadano de Mazatlán A.C., insistió ante la autoridad hacer efectivo la resolución interna. Así pasaron dos años, en la omisión, y de la Secretaría del Ayuntamiento de Mazatlán no se hizo nada. Nadie reclamó las velarias.
Coincidimos en que aplaudirle a la autoridad por hacer su trabajo es como aplaudirle al cajero automático por darte el dinero de tu sueldo, pero también es importante reconocer la voluntad política, y en este caso es un ejemplo claro de que cuando se quiere se puede, lo digo porque en este caso, el secretario del Ayuntamiento en la administración pasada, José de Jesús Flores Segura, hubiera tenido la voluntad de ejecutar el resultado de la investigación y exigir a la empresas proveedoras la reposición de las velarias éstas se habrían repuesto desde 2019 para ser exactos, pero no lo hizo.
El tema estaba sobre la mesa, incluso el Observatorio hizo público un posicionamiento en 2019 donde pedimos la reposición de las velarias como bien de todos. Hace unas semanas este Observatorio tuvo acercamiento con el actual secretario del Ayuntamiento, Édgar González Zataráin, porque el espíritu como organización ciudadana es mantener vínculo con la autoridad en aras de un trabajo colaborativo. En este acercamiento se le insistió a González Zataráin la urgencia de recuperar las velarias, y ya vimos que éstas se recuperaron, desde el pasado fin de semana están donde debieron estar siempre: en el parque lineal como bien público.
Sí se pudo, ya tenemos velarias nuevas.
Con esto nos queda claro que el Observatorio seguirá siendo gestor y vigilante de la ruta del presupuesto, porque nuestro interés es el bien colectivo, el que beneficia directamente a la ciudadanía. Ahora nos corresponde vigilar que las velarias hayan sido repuestas por las empresas responsables sin costo al Ayuntamiento. Eso lo averiguaremos y les contaremos el resultado.
Por ahora me despido y espero con gusto sus comentarios teniendo claro que cuando se quiere, se puede.
“No digan no puedo, digan no quiero, porque con voluntad todo se puede hacer”.
Esmeralda Arboleda Cadavid.
Primera mujer senadora en Colombia.
