/ jueves 12 de marzo de 2020

Ningún otro día sin mujeres

“No puedes esperar construir un mundo mejor sin mejorar a las personas. Con ese fin cada uno de nosotros debe trabajar para su propio mejoramiento y al mismo tiempo, compartir una responsabilidad general con toda la humanidad” “Es importante hacer un sueño de la vida y de la realidad de un sueño”.

Marie Curie; fue una científica pionera en el campo de la radiactividad, fue la primera mujer en recibir el premio nobel y la primera persona en recibir dos premios Nobel (en distintas especialidades Física y Química).

Una mujer que superó a la adversidad en momentos en los que la mujer tenía pocas opciones de superarse. Sus padres fueron un profesor de física y de una maestra de escuela que murió siendo ella una niña. Su familia tuvo dificultades económicas y Marie trabajó como institutriz para ayudar a que su hermana mayor estudiara en la Sorbona en Paris. Poco después de graduarse conoció Pierre Curie (profesor de Física y director del laboratorio de la Escuela de Física y Química Industrial de París), quien sería su esposo y con quien tuvo a dos hijas (Irene y Eve). En 1903; Marie, Pierre Curie y a Henri Becquerel recibieron el Premio Nobel de Física por los avances obtenidos en cuanto a la radioactividad y los fenómenos radioactivos. Después de obtener el galardón; Marie tuvo que trabajar en instituciones menores a las afueras de París (por el hecho de ser mujer), hasta que Pierre consiguió una cátedra en la Sorbona y pudo contratarla. Una vez más la desgracia hizo presencia en la vida; para arrebatarle a su marido tras ser arrollado por un auto en plena calle en el año de 1906. Ejemplar y admirable como toda mujer; Marie Curie continuó su trabajo en solitario a la edad de 38 años. En 1906 se convirtió en la primera mujer en impartir cátedra en la Sorbona y en 1908; fue la primera mujer jefa de laboratorio en esa misma institución. Además, fue nombrada directora del Instituto del Radio de París. Debido a la continuidad de sus trabajos realizados desde 1903; en 1911 recibió su segundo Nobel, en esta ocasión en el área de la Química. Del trabajo que siempre fue su pasión estuvo expuesta a elementos radioactivos, los efectos nocivos de estos provocaron a Marie una anemia aplásica lo que causó su muerte en 1934.

Desde hace años hemos visto el crecimiento profesional de la mujer y su interés por la ciencia y la tecnología. A pesar de los logros realizados por las mujeres en la educación y fuerza laboral; el progreso aun es desigual.

Es muy clara la brecha de género que existe; y lo confirma un estudio estadístico realizado por la UNESCO publicado en 2019. El estudio reveló que menos del 30% de los investigadores del mundo son mujeres. Los pocos datos obtenidos de algunos países revelaron que a las mujeres se les paga menos por realizar investigación y no progresan tanto como sus pares hombres en sus carreras. El promedio más alto de participación de investigadoras lo tiene Asia Central con el 48%, seguido de América Latina y el Caribe con 45%. En tanto que el promedio más bajo está en Asia meridional y occidental.

Es de destacar al país Myanmar (Birmania); en donde el 75% del total de sus investigadores son mujeres. Los índices de participación de investigadoras en los países de América son de 61% Venezuela, 53% Guatemala, 53% Argentina, 51% Panamá, 32% Bermuda, 29.9% Perú y México tiene un muy lamentable 33%. Para mejorar estos índices a favor de la mujer; se recomienda identificar los factores que disuaden a las mujeres a participar en carreras de ciencia y tecnología.

La plantilla de Investigadoras en México no es mayoría; pero son muy buenas con investigaciones y resultados de calidad mundial. Para muestra basta mencionar algunas como a la investigadora mexicana; María Esperanza Martínez Romero quién ganó el premio L'Oréal-Unesco 2020 a la Mujer y la Ciencia, por su trabajo desarrollado sobre el uso de bacterias respetuosas con el medio ambiente. Otro ejemplo es Rachel Mata; la primera científica latinoamericana en recibir premio a la excelencia 2020, en investigación botánica con plantas medicinales.

Existen cientos de mujeres investigadoras de excelencia en México, pero en las demás áreas su participación es destacada y ejemplar como las que se manifestaron y pararon el pasado 9 de marzo. El 50.21% de la población en México, es femenina con un estimado de 63,356,944 mujeres. El impacto económico por "Un día sin mujeres" se estima que fue de más de 34 mil millones de pesos. Todo ese dinero no es nada; lo importante es que no se pierda una más. El impacto de 9M fue alto, pero debe ser mayor cuando ellas alcancen más posiciones y se reduzca la brecha en la sociedad. Debemos estar orgullosos de las mujeres mexicanas que con la ausencia y su silencio retumbaron en sus centros la tierra para decir “aquí estoy”.

El día nueve fue triste salir a la calle, ir a la escuela o el trabajo y no verlas ahí. La ciudad, las calles lucían sin alma ni corazón y hasta la super luna anunciada para ese día se escondió. Estoy seguro de que muchos las amamos, las queremos y no las queremos lastimar y menos aún perder. Muchos estamos con ustedes y haremos lo que se necesite para darles un mundo mejor. A partir de este momento debemos caminar juntos en el proceso para tener el lugar que merecemos compartir. Sin ustedes simplemente no existiría la vida.

Marie Curie; no solo consiguió enormes avances científicos, sino que además demostró que las mujeres podían y debían hacerse un hueco en el mundo académico sin importar a quién le rabiase. “La mejor vida no es la más larga, sino la más rica en buenas acciones”: Marie Cuerie.

“No puedes esperar construir un mundo mejor sin mejorar a las personas. Con ese fin cada uno de nosotros debe trabajar para su propio mejoramiento y al mismo tiempo, compartir una responsabilidad general con toda la humanidad” “Es importante hacer un sueño de la vida y de la realidad de un sueño”.

Marie Curie; fue una científica pionera en el campo de la radiactividad, fue la primera mujer en recibir el premio nobel y la primera persona en recibir dos premios Nobel (en distintas especialidades Física y Química).

Una mujer que superó a la adversidad en momentos en los que la mujer tenía pocas opciones de superarse. Sus padres fueron un profesor de física y de una maestra de escuela que murió siendo ella una niña. Su familia tuvo dificultades económicas y Marie trabajó como institutriz para ayudar a que su hermana mayor estudiara en la Sorbona en Paris. Poco después de graduarse conoció Pierre Curie (profesor de Física y director del laboratorio de la Escuela de Física y Química Industrial de París), quien sería su esposo y con quien tuvo a dos hijas (Irene y Eve). En 1903; Marie, Pierre Curie y a Henri Becquerel recibieron el Premio Nobel de Física por los avances obtenidos en cuanto a la radioactividad y los fenómenos radioactivos. Después de obtener el galardón; Marie tuvo que trabajar en instituciones menores a las afueras de París (por el hecho de ser mujer), hasta que Pierre consiguió una cátedra en la Sorbona y pudo contratarla. Una vez más la desgracia hizo presencia en la vida; para arrebatarle a su marido tras ser arrollado por un auto en plena calle en el año de 1906. Ejemplar y admirable como toda mujer; Marie Curie continuó su trabajo en solitario a la edad de 38 años. En 1906 se convirtió en la primera mujer en impartir cátedra en la Sorbona y en 1908; fue la primera mujer jefa de laboratorio en esa misma institución. Además, fue nombrada directora del Instituto del Radio de París. Debido a la continuidad de sus trabajos realizados desde 1903; en 1911 recibió su segundo Nobel, en esta ocasión en el área de la Química. Del trabajo que siempre fue su pasión estuvo expuesta a elementos radioactivos, los efectos nocivos de estos provocaron a Marie una anemia aplásica lo que causó su muerte en 1934.

Desde hace años hemos visto el crecimiento profesional de la mujer y su interés por la ciencia y la tecnología. A pesar de los logros realizados por las mujeres en la educación y fuerza laboral; el progreso aun es desigual.

Es muy clara la brecha de género que existe; y lo confirma un estudio estadístico realizado por la UNESCO publicado en 2019. El estudio reveló que menos del 30% de los investigadores del mundo son mujeres. Los pocos datos obtenidos de algunos países revelaron que a las mujeres se les paga menos por realizar investigación y no progresan tanto como sus pares hombres en sus carreras. El promedio más alto de participación de investigadoras lo tiene Asia Central con el 48%, seguido de América Latina y el Caribe con 45%. En tanto que el promedio más bajo está en Asia meridional y occidental.

Es de destacar al país Myanmar (Birmania); en donde el 75% del total de sus investigadores son mujeres. Los índices de participación de investigadoras en los países de América son de 61% Venezuela, 53% Guatemala, 53% Argentina, 51% Panamá, 32% Bermuda, 29.9% Perú y México tiene un muy lamentable 33%. Para mejorar estos índices a favor de la mujer; se recomienda identificar los factores que disuaden a las mujeres a participar en carreras de ciencia y tecnología.

La plantilla de Investigadoras en México no es mayoría; pero son muy buenas con investigaciones y resultados de calidad mundial. Para muestra basta mencionar algunas como a la investigadora mexicana; María Esperanza Martínez Romero quién ganó el premio L'Oréal-Unesco 2020 a la Mujer y la Ciencia, por su trabajo desarrollado sobre el uso de bacterias respetuosas con el medio ambiente. Otro ejemplo es Rachel Mata; la primera científica latinoamericana en recibir premio a la excelencia 2020, en investigación botánica con plantas medicinales.

Existen cientos de mujeres investigadoras de excelencia en México, pero en las demás áreas su participación es destacada y ejemplar como las que se manifestaron y pararon el pasado 9 de marzo. El 50.21% de la población en México, es femenina con un estimado de 63,356,944 mujeres. El impacto económico por "Un día sin mujeres" se estima que fue de más de 34 mil millones de pesos. Todo ese dinero no es nada; lo importante es que no se pierda una más. El impacto de 9M fue alto, pero debe ser mayor cuando ellas alcancen más posiciones y se reduzca la brecha en la sociedad. Debemos estar orgullosos de las mujeres mexicanas que con la ausencia y su silencio retumbaron en sus centros la tierra para decir “aquí estoy”.

El día nueve fue triste salir a la calle, ir a la escuela o el trabajo y no verlas ahí. La ciudad, las calles lucían sin alma ni corazón y hasta la super luna anunciada para ese día se escondió. Estoy seguro de que muchos las amamos, las queremos y no las queremos lastimar y menos aún perder. Muchos estamos con ustedes y haremos lo que se necesite para darles un mundo mejor. A partir de este momento debemos caminar juntos en el proceso para tener el lugar que merecemos compartir. Sin ustedes simplemente no existiría la vida.

Marie Curie; no solo consiguió enormes avances científicos, sino que además demostró que las mujeres podían y debían hacerse un hueco en el mundo académico sin importar a quién le rabiase. “La mejor vida no es la más larga, sino la más rica en buenas acciones”: Marie Cuerie.