Las enseñanzas de El Químico a El Cuén y El derRocha Moya, en un fin de semana en Mazatlán para La Semanera en Culiacán, es como estar bronceándose al sol tropical con un temblor invernal, sea con una Pacífico y un tequila Los Osuna en la Fonda Del Chalío; in situ: Olas Altas, uniéndoseles La Tere Guerra para ver en qué andan las mujeres marismeñas-mazatlecas en lo de las Reinas para El Carnaval/2022, tratándose la reunión para ver qué hacer con la fiesta carnestolenda, carnavalera y carnavalesca.
Todas las buenas, las malas y las peores cosas para Mazatlán se han decidido en Olas Altas, habiéndose establecido esta acción como norma cuando El Gitano asesinó al gobernador Loaiza en el salón Andaluz del hotel Belmar, a unos pasos del bullicioso y escandaloso carnaval sobre las olas de la historia marismeña-mazatleca, aunque ahora sea sobre las aguas negras.
Cuando se dice y se canta que en Mazatlán es donde se rompen las olas, hay que decir y cantar que también se rompen las virginidades, se exhiben las vanidades y las frivolidades como también se gestan los embarazosos-embarazos de futuras jóvenes madres solteras, consensuadas y no consensuadas las relaciones hetero-homo y transexuales, cuando no a discreción sí a prostitución, el pase a mano y a trasmano con sobadas de mariguanol, pastas y polvos para el éxtasis metanfetamino y fentanilo para ver El Rayo Verde a través de La Perla del Pacífico y echándose clavados en la carpa-alberca Olivera, haciéndole a El Clavadista del Panzazo Playero Olalteño.
Todo lo anterior, se sepa o sepan cuántos, no lo saben El Cuén, El derRocha Moya y La Tere Guerra, cuando El Químico se las sabe de todas-todas, generacionalmente, El Felton y El Pucheta, menos el mocho y el ecolojete de El Higuera, anti-Monos Bichis-La Mujer Mazatleca, contra los ficus, censor hipócrita y moralino para los colleges tours, alcalde tres veces santón, secretario particular de sus negocios personales con el panismo-priismo-morenismo de la cuarta trastornación en la gobernanza-gerencial sinaloense con los Arellano-empresarios-desarrolladores-inmobiliarios-turísticos, El Muchacho Alegre y Los Chapitos Brothers con El Zambada-Godfather.
El menor y el mayor negocio ha estado y está en Olas Altas, por más que sea el lugar común de siempre con las mismas costumbres y con las mismas gentes de siempre, lo marismeño-mazatleco, es un rincón urbano y marino semejante al rincón urbano y marino en el malecón de la Habana Vieja con el malecón del Viejo Mazatlán.
Así como El Gitano, antes de pasar al salón Andaluz estuvo en el bar del hotel Belmar tomando unos tragos de cerveza o unos tragos de tequila, el Gral. Loaiza hizo lo contrario al Gral. Macías: no aceptar la siembra de mariguana y amapola ha pedido de Bugsy Siegel, el de La Vegas y la Mafia Italiana en la Cuba-Batista con los casinos-puteros, Bugsy Siegel le hizo otro pedido al Gral. Macías: que buscara a un pistolero-sicario como El Gitano para asesinar al Gral. Loaiza, Gobernador de Sinaloa, por haberle quemado los sembradíos.
Por eso, El Químico, se siente único e histórico cuando no piensa lo que hace y si lo hace es, a conveniencia, aprovechándose de la experiencia ajena como de su arribismo personal y obtener una ganancia entre cierta y fraudulenta: promocionar y vender un Mazatlán existente en el pasado e inexistente en el presente, además, a El Químico, lo único e histórico que le sucede en su cabeza ociosa es que está transformando a Mazatlán en la vaguedad y en la vaciedad de su proceder errático y obtuso con el desplante de la soberbia y la arrogancia del nuevo rico y ruco que jamás se imaginó que iba a presumir en plena decadencia con el coronaómicron (de y para) el Carnaval.
