/ sábado 16 de marzo de 2019

EL TAMAÑO IMPORTA

Buen día amigos. ¿Cómo están?

“¿El tamaño importa?”, es una de las preguntas más frecuentes que escucho de los hombres. O frases como: “¡Realmente las mujeres quieren penes grandes!, ¿qué voy a hacer?”.

No es infrecuente, encontrar hombres con baja estima por este motivo. Hombres que se creen menos hombres porque su pene no mide 20 centímetros. Ni 15.
Y esto causa que muchos hombres que creen que su pene no es “apto” para dar placer, se refugian en el trabajo, en la casa, en los videojuegos, en el alcohol, en los casinos… en cualquier cosa que distraiga la mente de aquello que rechazan.

Empecemos por reconocer, que desde que el hombre es hombre, ha venerado al pene. Existe por cultura un culto al pene. Una sociedad falocentrista, coitocentrista (que le da mucha importancia al pene y a la penetración), que para su desgracia la modernidad le trajo también las tecnologías, la pornografía y el internet, que mezclados con la ignorancia, los moralismos, el tabú hacia el tema de la sexualidad, el desconocimiento de la misma, han dado como resultado un montón de hombres inseguros por el tamaño de su pene. Y algunas industrias y ramas médicas se han beneficiado de esas inseguridades masculinas, para vender toda clase de tratamientos y artefactos para ganar algunos centímetros. En algunos casos sometiéndose a cirugías con pobres resultados, o sometiendo a sus penes a verdaderos aparatos de tortura, dañándolo gravemente.

Y por otro lado, tenemos mujeres que han comprado perfectamente la idea de que pene grande, es igual a placer.

En alguna ocasión estuve con un tipo que tenía un pene tan grande, que me negué a que intentar la penetración. ¡Meter todo eso! ¡No!

Y charlando después con ese hombre, me contó que él sufría mucho precisamente por eso. Las mujeres lo rechazaban porque su pene era demasiado grande, y la penetración a medias no se le daba. Provocando que ninguna mujer deseara estar con él.

Yo no sé de qué tamaño creen los hombres que es un canal vaginal, pero créanme que aunque se dilate y lubrique con la excitación, un pene demasiado grande causa más dolor que placer para muchas mujeres. No dudo que haya miles de mujeres que se adapten y lo disfruten. No. Pero sí estar conscientes que hay de todo y para todos.

Sentirte mal por creer que tu pene es demasiado pequeño en estado erecto, cuando quizá te mide arriba de nueve centímetros, es un error.

Existen hombres con penes que miden de dos a siete centímetros en estado erecto, para los cuales es imposible poder tener siquiera hijos vía penetración, que acuden a la reproducción asistida. Y evidentemente al no poder penetrar, no pueden acceder a ese placer. Pero, ¿Cuántos hombres realmente tienen micro pene? ¿Y cuántos se creen que lo tienen pequeño sin razón? , ¿Hasta qué punto, la pornografía ha influenciado en la mente de hombres y mujeres al grado de provocar este tipo de inseguridades? Las mujeres no nos libramos de esas inseguridades, pero hoy estamos hablando de los hombres.

“El tamaño del pene, le importa al dueño de ese pene”, dijo un maestro en una clase una vez. Y es verdad. El tamaño del pene importa más por lo que causa en la autoestima de ese hombre, que por el tamaño en sí. Es por eso que el tamaño importa. Por lo que causa, por lo que provoca en los hombres y en sus relaciones.

Si te encuentras en esta situación, y no estás dentro de la categoría de un micro pene, busca ayuda profesional. Es un error privarse del placer por una creencia impuesta por la desinformación, el tabú y la pornografía. Un pene grande no te hace más hombre, o necesariamente más feliz. Es tu amor propio, tu seguridad, tus artes amatorias, tu carácter, tus detalles, tus habilidades eróticas, tus valores, tu trato, tu manera de hacer sentir y de amar lo que realmente te hará valioso ante tu pareja. No tu pene.

¿De qué sirve un pene enorme si eres un patán?, ¿Si eres machista, egoísta o torpe en la cama? De nada te servirá créeme. Y me parece que muchas mujeres me darán la razón. No dudo que haya personas que prefieran un pene enorme aunque el resto de la relación esté terrible. Pero me parece que son las menos.

No eres un pene. No eres una erección. Eres mucho más que eso. Y si no lo comprende tu pareja, no tienes que cambiar de pene. Tienes que cambiar de pareja.

Que tengan un excelente fin de semana, nos leemos el próximo sábado y recuerden, que “El mayor placer, te lo da el saber”.

Eugenia Flo, sexóloga sustantiva. Facebook: Eugenia Flo
eugeniasexologa@gmail.com

Buen día amigos. ¿Cómo están?

“¿El tamaño importa?”, es una de las preguntas más frecuentes que escucho de los hombres. O frases como: “¡Realmente las mujeres quieren penes grandes!, ¿qué voy a hacer?”.

No es infrecuente, encontrar hombres con baja estima por este motivo. Hombres que se creen menos hombres porque su pene no mide 20 centímetros. Ni 15.
Y esto causa que muchos hombres que creen que su pene no es “apto” para dar placer, se refugian en el trabajo, en la casa, en los videojuegos, en el alcohol, en los casinos… en cualquier cosa que distraiga la mente de aquello que rechazan.

Empecemos por reconocer, que desde que el hombre es hombre, ha venerado al pene. Existe por cultura un culto al pene. Una sociedad falocentrista, coitocentrista (que le da mucha importancia al pene y a la penetración), que para su desgracia la modernidad le trajo también las tecnologías, la pornografía y el internet, que mezclados con la ignorancia, los moralismos, el tabú hacia el tema de la sexualidad, el desconocimiento de la misma, han dado como resultado un montón de hombres inseguros por el tamaño de su pene. Y algunas industrias y ramas médicas se han beneficiado de esas inseguridades masculinas, para vender toda clase de tratamientos y artefactos para ganar algunos centímetros. En algunos casos sometiéndose a cirugías con pobres resultados, o sometiendo a sus penes a verdaderos aparatos de tortura, dañándolo gravemente.

Y por otro lado, tenemos mujeres que han comprado perfectamente la idea de que pene grande, es igual a placer.

En alguna ocasión estuve con un tipo que tenía un pene tan grande, que me negué a que intentar la penetración. ¡Meter todo eso! ¡No!

Y charlando después con ese hombre, me contó que él sufría mucho precisamente por eso. Las mujeres lo rechazaban porque su pene era demasiado grande, y la penetración a medias no se le daba. Provocando que ninguna mujer deseara estar con él.

Yo no sé de qué tamaño creen los hombres que es un canal vaginal, pero créanme que aunque se dilate y lubrique con la excitación, un pene demasiado grande causa más dolor que placer para muchas mujeres. No dudo que haya miles de mujeres que se adapten y lo disfruten. No. Pero sí estar conscientes que hay de todo y para todos.

Sentirte mal por creer que tu pene es demasiado pequeño en estado erecto, cuando quizá te mide arriba de nueve centímetros, es un error.

Existen hombres con penes que miden de dos a siete centímetros en estado erecto, para los cuales es imposible poder tener siquiera hijos vía penetración, que acuden a la reproducción asistida. Y evidentemente al no poder penetrar, no pueden acceder a ese placer. Pero, ¿Cuántos hombres realmente tienen micro pene? ¿Y cuántos se creen que lo tienen pequeño sin razón? , ¿Hasta qué punto, la pornografía ha influenciado en la mente de hombres y mujeres al grado de provocar este tipo de inseguridades? Las mujeres no nos libramos de esas inseguridades, pero hoy estamos hablando de los hombres.

“El tamaño del pene, le importa al dueño de ese pene”, dijo un maestro en una clase una vez. Y es verdad. El tamaño del pene importa más por lo que causa en la autoestima de ese hombre, que por el tamaño en sí. Es por eso que el tamaño importa. Por lo que causa, por lo que provoca en los hombres y en sus relaciones.

Si te encuentras en esta situación, y no estás dentro de la categoría de un micro pene, busca ayuda profesional. Es un error privarse del placer por una creencia impuesta por la desinformación, el tabú y la pornografía. Un pene grande no te hace más hombre, o necesariamente más feliz. Es tu amor propio, tu seguridad, tus artes amatorias, tu carácter, tus detalles, tus habilidades eróticas, tus valores, tu trato, tu manera de hacer sentir y de amar lo que realmente te hará valioso ante tu pareja. No tu pene.

¿De qué sirve un pene enorme si eres un patán?, ¿Si eres machista, egoísta o torpe en la cama? De nada te servirá créeme. Y me parece que muchas mujeres me darán la razón. No dudo que haya personas que prefieran un pene enorme aunque el resto de la relación esté terrible. Pero me parece que son las menos.

No eres un pene. No eres una erección. Eres mucho más que eso. Y si no lo comprende tu pareja, no tienes que cambiar de pene. Tienes que cambiar de pareja.

Que tengan un excelente fin de semana, nos leemos el próximo sábado y recuerden, que “El mayor placer, te lo da el saber”.

Eugenia Flo, sexóloga sustantiva. Facebook: Eugenia Flo
eugeniasexologa@gmail.com

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